Anita Forero de López, nació en Cogua, pero desde muy niña la trajeron para Zipaquirá. En 1949 se graduó como “Maestra de Escuela Rural” en la Normal de Nemocón, formación que le abrió las puertas a su profesión de por vida.
AUN DE LA VIOLENCIA, SIGUIÓ LUCHANDO:
Su primer trabajo fue en San Juan de Río Seco, Cundinamarca, municipio en donde conoció a quien fuera su esposo; sin embargo, por culpa de la violencia de la época, tuvo que venirse con su familia para Zipaquirá. “Mi mamá llegó aquí a buscar trabajo como docente, pero como no había vacantes, entonces habló con el Obispo y el Párroco de la época y les propuso fundar una escuela y que ella se encargaba de sacarla adelante; así nació la escuela Rafael Pombo en el barrio San Juanito. Posteriormente, también fundó el colegio María Auxiliadora, donde fue profesora a gratuidad de varias asignaturas y lo hacía con todo amor y dedicación porque eso la hacía feliz”, dijo a Gente Activa, su hijo Roldán López.
Siendo nombrada rectora de la concentración República del Brasil, logró traer al embajador de Brasil y año tras año, representantes de ese gobierno se convirtieron en padrinos de las necesidades de la institución, labor que aún se mantiene allí.
JEFE DE GRUPO Y SUPERVISORA:
Luego fue nombrada la primera mujer “Jefe de Grupo de Zipaquirá”, el equivalente hoy, a secretario de Educación. Sus compañeros docentes la postularon al cargo de Supervisora de Educación de Cundinamarca. “Mamá se apropió de su cargo y recorrió todo el Departamento, inclusive muchas veces llegaba a caballo a las escuelas rurales, pero era feliz y cumplidora con su deber. Toda esa labor le mereció que el presidente de la República, Misael Pastrana, la condecorara con la Orden al Mérito Educativo, como la docente insigne de Cundinamarca. Finalmente, ella se pensionó siendo Supervisora” contó Roldán.
Doña Anita fue miembro directivo de la Asociación de Pensionados del Magisterio de Cundinamarca. Fundó la Asociación de Pensionados Docentes de Zipaquirá, ente que desde que se creó, se reúne frecuentemente en el Restaurante La Cascada.
LÍDER SOCIAL
Al mes de estar pensionada, la nombraron gerente de la financiera Inversora S.A. donde conoció al gremio bancario de Zipaquirá y en poco tiempo fundaron la Asociación Bancaria, de la cual siempre fue su secretaria General.
Su don de gentes y deseo de servir hizo que fuera vinculada a diferentes entidades de orden cívico y social de Zipaquirá, entre ellas el Club de Leones, Club del Comercio y Funzipa, fundación que precisamente la había invitado para otro homenaje este sábado, coincidente con el día de sus exequias.
EXEQUIAS SÁBADO 3:00 P.M:
“Me siento feliz porque Mamá, luego que caminara de una habitación a otra, se sentó y falleció muy tranquila en mis brazos, creo que Dios la premió con una santa muerte”, puntualizó Roldán López, quien junto a sus hermanos Ángel Antonio, Nydia Elvira, Elsa Cristina, Javier David y Hernando Arturo, crecieron al amparo de una gran maestra, esposa y mujer, que se fue con el deber cumplido a sus 95 años de edad.
Su velación se cumple en el Complejo Funerario Fundadores del Parque Cementerio Zipaquirá. Sus exequias se llevarán a cabo en la Catedral Diocesana, el sábado 25 de noviembre a las 3:00 p.m.
Gente Activa, se une en oración de acción de gracia a Dios por haber contado con el apoyo de doña Anita en diferentes oportunidades. A sus familiares nuestro aprecio, y a esta gran educadora, soñadora, servidora y mujer ejemplar: Paz en la Eternidad.
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